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EL MIEDO: 6to enemigo del éxito

EL MIEDO: Enemigo del éxito #6

Por: Dora Ortiz de Olivas/Terapeuta Familiar/Conferencista

¡Wooow! Qué impresionante cuando nos enfrentamos a un peligro y sentimos angustia o desconfianza, creyendo que sucederá todo lo contrario a lo que deseamos; esto nos paraliza muchas veces o nos hace correr sin rumbo fijo, ¿Te ha pasado? Estamos hablando del miedo.

 

Como mujeres queremos vivir exitosas, caminando con la cabeza en alto, orgullosas de cada reto cumplido un día a la vez, pero de pronto nos enfrentamos a esta emoción que muchas veces no sabemos manejar y nos desenfocamos de nuestro propósito.

¿Qué es el miedo?

Es una emoción provocada por un estímulo. Es la reacción ante un peligro real o imaginario. Angustia o desconfianza. Creer que sucederá lo contrario a lo que se desea.

Tenemos miedo a la oscuridad, a las alturas, a hablar en público, iniciar un proyecto nuevo, exponernos ante las opiniones de los demás. Miedo al ceño fruncido y los dientes apretados, a la mano golpeadora, miedo al éxito, por mencionar algunos.

¿Cuál es el estímulo?

Un hecho por ejemplo una invitación a la montaña.

¿Cuál es el peligro real o imaginario?

Que suceda lo contrario a lo que deseo. Que me resbale, me pique algún animal, me fracture, caiga a un precipicio, etc.

¿Qué nos provoca tan sólo de pensarlo? Una emoción. Angustia y desconfianza. Miedo.

En otras una persona que tiene miedo cree en lo inapropiado, en lo que le paraliza.

Algunos efectos del miedo:

  • Mal-estar.
  • Ansiedad y depresión.
  • Pérdida de control.
  • Incapacidad para tomar decisiones correctas.
  • Parálisis.
  • Estancamiento.

¿Para qué nos sirve el miedo?

Para reaccionar y escapar del peligro inminente, cuando realmente lo hay. ¿Han escuchado la frase: “¡Uy, qué miedo!”? Por lo regular decimos esto y luego tendemos a alejarnos de aquello que nos provoca tal emoción.

Imagínate si lo que te da miedo es conocer a tu diseñador.

Esto te alejaría de él y por lo tanto jamás conocerías el propósito que él tiene para ti. No sabrías cómo fue que te diseñó y hacia dónde quiere dirigirte; andarías como el pueblo Israelí dando vueltas en el desierto por cuarenta años y vagando sin llegar a la tierra prometida.

Podrías terminar esta vida sin hacer aquello para lo cual fuiste diseñada; estarías sólo perdiendo el tiempo en este planeta llamado tierra, viviendo sólo por vivir; en otras palabras: subsistiendo solamente; alejada de la linea de las ganadoras; paralizada, estancada y yo creo que eso no es lo que tu diseñador planeó para ti. Él te pensó para triunfar y para vivir una vida exitosa, haciendo aquello que te apasiona, aquello que tu sabes que puedes hacer muy bien, que  da honra a tu diseñador y que impacta de manera positiva a otras personas.

Es contraproducente cuando sentimos miedo  de algo que no debemos temer. No debemos tener miedo a Dios ni a sus instrucciones pues éstas siempre son para nuestro bien. Dios es bueno y de él solamente salen cosas buenas para nosotros, aunque muchas veces no lo veamos de esa manera.

Piensa en las siguientes frases y piensa si te identificas con alguna de ellas:

¡Le tengo miedo a la reacción de Dios, mejor me alejo de él!

¡Tengo miedo a enfrentar la verdad!

¡Miedo a salir de la zona de confort!

Una persona que tiene miedo, se queda paralizada con su vista en el estímulo. La montaña, la oscuridad, la opinión negativa; el proyecto frustrado; el ceño fruncido, la mano golpeadora, las críticas, los juicios, la vergüenza..etc. Si quieres triunfar en la vida, debes superar tus mayores miedos

Algunos temores nos detienen más que otros. Frenan nuestras habilidades haciendo que nuestros sueños se vuelvan imposibles. Para ser exitosas, debemos “tomar al toro por los cuernos” (enfrentar esos miedos).

Cinco miedos comunes que debes superar para ser exitosa:

1. El miedo a la crítica.

Muchas personas temen vivir la vida de sus sueños por miedo a lo que otros pensarán. Este temor es muy común; pero tomar decisiones importantes basándonos en lo que las personas piensan, incluso tus amigos más cercanos y tu familia puede debilitar el resto de tu vida.  En lugar de eso, piensa en lo que esas mismas personas dirán cuando te vean caminar en el éxito.

2. Miedo a la pobreza.

Existen aquellas que están atoradas en el “modo de supervivencia”. Una dice; “¡Hey, tengo 28 años y estoy atrapada en un cubículo 50 horas a la semana! llevo una vida promedio, pago mis cuentas pero sé que puedo hacer otra cosa y alcanzar mi potencial. Estoy cansada de estar aburrida, haciendo siempre lo mismo casi mecánicamente y quiero usar mis habilidades y talentos. Sin embargo, temo quedarme sin dinero”. Muchas personas se contentan con la mediocridad porque piensan que deben “sobrevivir” en lugar de “prosperar”. Ignoran todo lo que su diseñador les ha dado para vivir plenas. No seas mediocre ni conformista sino aprende a tener contentamiento mientras vas emprendiendo. Se diligente y constante.

3. Miedo a la vejez (y a la muerte) 

Hay una cierta edad en la que las personas renuncian a su vida o deciden ser viejos. Benjamín Franklin una vez dijo: “Muchas personas mueren a los 25 años pero son enterrados a los 75”. Para algunos individuos, esta muerte metafórica – cuando deciden instalarse en un estilo de vida mediocre – llega incluso antes de los 25 años. Ellos creen que nunca lograrán sus sueños y renuncian por adelantado. El miedo a la vejez, por otro lado, llega cuando las personas tienen que hacer un cambio radical de carrera. Dicen: “ ¿Cómo me voy a dedicar a otra cosa si siempre he hecho esto?  Toda mi vida en el sector salud, educativo, etc. Además, tiene que salir todo perfecto, de lo contrario no podré mantener a mi familia”. No te fijes en tu edad cronológica sino en la confianza en ti misma y en Aquél que te diseñó. Mientras tengas vida, siempre hay una oportunidad de seguir creciendo.

4. Miedo al fracaso.

La pegunta popular “¿Y si…?”, regularmente la vemos de forma negativa: “¿Y si no funciona?” “¿Y si fracaso?” “¿Y si me sale mal?” ”¿Y si sólo es pérdida de tiempo? Estas son las preguntas equivocadas. En lugar de pensar en todas las maneras en las que podrías fracasar, ¡concéntrate en todas las maneras en las que podrías triunfar! Incluso si te equivocas o cometes un error, tienes la oportunidad de corregir el rumbo.

5. Miedo al éxito.

Las personas temen ser las mejores versiones de sí mismas. Hacer lo que les apasiona, salir de la zona de confort. Tienen miedo de cómo es su verdadera expresión personal. Ven a otras personas y piensan “Yo podría hacerlo también” o “¿Por qué eso no me pasa a mí?” En realidad temen recibir fama, riqueza, reconocimiento y amor. Aunque eso es lo que desean. A la gran mayoría de nosotras nos enseñaron que para ser exitosas se tenía que trabajar muy duro; dejar la vida entera en el camino; muchas veces sacrificar tus sueños y anhelos más profundos. Muchas familias operan bajo la creencia de que lograr los sueños no es realista, así que nunca impulsan a sus hijos a soñar. Asumen que es imposible porque no lo lograron ellos mismos. En lugar de adoptar este esquema de pensamiento, cree en que vas a lograr un éxito masivo;, vas a hacer lo que te apasiona, paso a paso, poco a poco, con mucha fe y dedicación de tal manera que impactarás a generaciones.

Todos los miedos anteriores se superan con fe, amor y con la verdad por delante. La verdad te hace libre y te impulsa a levantarte y continuar. Reconocer tus miedos ahora puede ser tu mejor manera de comenzar a caminar exitosamente. Si sabes lo que quieres, toma los pasos necesarios para afrontar tus miedos y lograrás más de lo que esperas en la vida; más de lo que obtendrías si dejas que la duda y la incertidumbre te dominen.

Consejos prácticos para enfrentar el miedo y comenzar a caminar en el éxito:

  1. No seas una copia de alguien más o el fruto de las opiniones y críticas de otros, sé tú, sé original.
  2. Deja la mediocridad y el conformismo. Mantente contenta con lo que tienes ahora, pero trabaja por algo mejor cada día.
  3. Confía en ti misma y en Aquél que te diseñó. No hay edad para envejecer, mantente en crecimiento.
  4. Concéntrate en triunfar, no en el fracaso y si te equivocas, siempre habrá una oportunidad de aprender una nueva lección.
  5. Deja que Dios cambie tus miedos en fe.

“Llegar a la cumbre no te hace exitosa, pero si cada paso caminando hacia ella.
Todo lo puedes lograr con la fuerza que te da tu diseñador, si él sabe que puedes, por alguna razón será”


(Dora Ortiz)

 

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  • Dora Ortiz de Olivas
  • Terapeuta Familiar/Conferencista
  • Locutora del programa radial “Mujer con Propósito”
  • Co-Fundadora de “Enfocando Vidas”
  • dortiz@proposito.net

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