La ansiedad por comer se puede dar con más frecuencia durante el confinamiento por el coronavirus.
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Con la declaración del estado de alarma y las medidas que implica para tratar de frenar los contagios por coronavirus en España, es muy importante lleva a cabo hábitos y rutinas saludables durante el aislamiento en casa.
A la realización de ejercicios, actividades en familia, entretenimiento y unos buenos hábitos a la hora de teletrabajar, hay que sumar una buena dieta, ya que esta situación de confinamiento, altera nuestro ritmo de vida y puede dar lugar a ansiedad.
La ansiedad por la comida
En el día a día normal de una persona pueden darse situaciones de estrés, agobio o nervios que pueden producir ansiedad por la comida. Sin embargo, estas situaciones se han agravado y multiplicado con el aislamiento por el coronavirus.
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Así, en estas fechas en las que hay que estar todo el día en casa, se han dejado de lado las rutinas diarias, se ha reducido la actividad física y el deporte y han aumentado las situaciones de estrés y agobio por no poder seguir con una vida normal. Todo ello contribuye a comer peor, entre horas y de forma compulsiva y menos saludable.
Esta ansiedad por la comida puede manifestarse mediante varios signos, tal y como informa el blog del centro de nutrición de Laura Jorge. Entre estos signos está el pensar solamente en un único alimento, pérdida de control por la comida, sentir que no se puede controlar la emoción de otra manera o sentimiento de culpabilidad tras la ingesta.
Consejos para controlar la ansiedad por la comida
Para quien haya notado estos días algunos de estos signos, es recomendable seguir una serie de consejos para tratar de controlarse antes, durante y después de comer:
- Lo primer es preguntarse si realmente es lo que quieres, observar las emociones en ese momento y darse un tiempo para reducir esa emoción para llevar a cabo una ingesta más consciente.
- Antes de comer lo primero que se antoje, hay que tratar de sustituirlo por un alimento más saludable.
- En caso de no elegir esa alternativa más saludable, lo que hay que hacer es tratar de disfrutar lo que se va a comer, sin sentimiento de culpabilidad.
- Hay que tratar de comer sentado, con un plato, aumentando así la toma de conciencia y saciando más la ansiedad por los alimentos.
- Una vez ingerido el alimento, no hay que tener culpabilidad y no hay que pensar en compensar después con ejercicio u alimentos más sanos, ya que esto aumenta la ansiedad.