Estos sirven para que la persona enferma no contagie a los demás.
Así como cubrimos nuestra boca para no contagiar de Covid -19 a otras personas, también debemos de cuidar de no abrirla para lastimar y contagiar a otros con cosas negativas. Si no tengo nada bueno que decir mejor cubro mi boquita.
Hablemos aquello que anima, que levanta, que edifica, que da esperanza, que aumenta la fe. Pensemos positivo para hablar positivo.
Las escrituras nos dicen: «De la abundancia del corazón, habla la boca». (Lucas 6:45)
Dora Ortiz
Terapeuta Familiar. ¿Puedo ayudarte?. Citas al: 662 352 00 58