El mareo es un síntoma de alguna alteración del organismo, que no siempre indica una enfermedad o condición grave y, la mayoría de las veces, ocurre por una situación conocida como laberintitis. Pero también puede indicar alteraciones en el equilibrio, hipotensión, alteraciones en la función del corazón o por algún efecto secundario de algunos medicamentos.
Es más común que el mareo surja en ancianos, sin embargo, también ocurre en jóvenes, y puede surgir en diferentes situaciones dependiendo de la causa como al estar acostado, que es común en la laberintitis, al levantarse que surge por caídas de la presión arterial o al realizar algún esfuerzo físico que ocurre en problemas cardíacos o de la presión.
Cuáles son las causas y qué hacer en caso de mareo
Siempre que surgen episodios repetidos de mareos, es recomendado agendar una consulta con el médico general o el médico de familia para que sean investigadas las posibles causas, sin embargo, si el mareo es muy fuerte o dura más de 1 hora, se recomienda ir al centro de salud para una evaluación y que sea tratado lo más rápido posible.
Principales causas de mareo
Existen diversas formas de mareos que pueden aparecer solas o acompañadas de otros síntomas como náuseas, debilidad en las piernas, dolor de cabeza o sensación de tener la cabeza vacía. Las principales causas son:
1. Vértigo o Laberintitis
Vértigo es el mareo que da la sensación de que todo está girando alrededor, que puede venir acompañada de náuseas y zumbido, y normalmente ocurre por alteraciones en el oído. El vértigo suele dar mareo incluso al estar acostado, y es común que se desencadene con movimientos hechos con la cabeza, como girar de lado en la cama o mirar hacia un lado.
El vértigo postural paroxístico benigno, conocido popularmente como laberintitis simple, es la causa más común de vértigo y ocurre por el desprendimiento de los otolitos, que son pequeños cristales que se ubican en los canales del oído, responsables por parte del equilibrio.
Qué hacer: el tratamiento para el vértigo postural es hecho por el otorrino, el cual puede hacer unas maniobras para volver a colocar los otolitos en su sitio, llamada maniobra de Epley, además de recomendar el uso de medicamentos como la Betahistina de uso diario o Dramin para las crisis. Es recomendado observar la presencia de tapones de cera en el oído, evitar el estrés, el consumo de cafeína, azúcar y cigarrillo, que son situaciones que pueden empeorar las crisis de vértigo.
Otras situaciones de vértigo que son menos comunes, son aquellas causadas por la inflamación o infección del oído, neuritis vestibular y enfermedad de Ménière.
2. Desequilibrio
El desequilibrio es otra causa importante de los mareos, y ocurre porque genera una sensación de estar tambaleándose o de pérdida del equilibrio. Esta situación puede causar mareos constantes y generalmente ocurre en los ancianos o en situaciones de:
Alteración de la visión, como catarata, glaucoma, miopía o hipermetropía;
Enfermedades neurológicas, como por ejemplo, Parkinson, ACV, tumor cerebral o Alzheimer;
Golpe en la cabeza, que puede causar lesiones temporarias o permanentes en la región cerebral que regula el equilibrio;
Pérdida de sensibilidad en los pies y en las piernas, causada por la diabetes;
Consumo de alcohol o drogas, que alteran la percepción y la capacidad de funcionamiento del cerebro;
Uso de medicamentos que pueden alterar el equilibrio como por ejemplo el Diazepam, Clonazepam, Fernobarbital, Fenitoína y Metoclopramida.
Qué hacer: para tratar el desequilibrio, es necesario resolver su causa, con un adecuado tratamiento de la visión con el oftalmólogo o de la enfermedad neurológica con el neurólogo. También es importante la consulta con el geriatra o el médico general para que sean hechos los ajustes de la medicación de acuerdo con la condición y la necesidad de cada persona.
Cuáles son las causas y qué hacer en caso de mareo
3. Hipotensión
El mareo que ocurre por alteraciones cardíacas y por la circulación es llamada pre-síncope o hipotensión ortostática, y ocurre cuando la presión cae y la sangre no es bombeada adecuadamente para el cerebro, causando la sensación de desmayo o de oscurecimiento surgiendo puntos brillantes en las visión.
Este tipo de mareo puede surgir al despertar, al levantarse, durante el ejercicio o incluso, de forma repentina al estar parado. Las principales causas son:
Caída brusca de la presión, llamada como hipotensión ortostática, y surge por un defecto en el ajuste de la presión, que normalmente no es grave y ocurre por cambios en la postura como levantarse de la cama o la silla;
Problemas cardíacos, como arritmias o insuficiencia del corazón, que dificultan el flujo de sangre por la circulación;
Uso de algunos medicamentos que causan caídas en la presión arterial, principalmente en ancianos, un ejemplo son los diuréticos como el nitrato, metildopa, clonidina, levodopa y amitriptilina;
Embarazo, pues es un período en que hay modificaciones en la circulación y puede haber disminución de la presión arterial debido al peso del útero sobre los vasos sanguíneos.
Otras situaciones como la anemia y la hipoglucemia, a pesar de no causar caída de presión, alteran la capacidad de llevar oxígeno y nutrientes para las células cerebrales pudiendo causar así la sensación de mareo.
Qué hacer: el tratamiento de este tipo de mareo también depende de la resolución de su causa, que puede ser hecha por un cardiólogo, geriatra o un médico general a través de la investigación con exámenes médicos y realizando los ajustes necesarios.
4. Ansiedad
Alteraciones psicológicas como depresión y ansiedad causan mareos, ya que desencadenan el síndrome de pánico y alteran la respiración. Estas situaciones provocan un mareo que generalmente es acompañado por falta de aire, temblores y hormigueo en las manos, pies y boca.
Este tipo de mareo puede ocurrir de forma repetida, y surge en períodos de mayor estrés.
Qué hacer: se debe tratar la ansiedad con psicoterapia y si es necesario con medicamentos antidepresivos o ansiolíticos prescritos por el psiquiatra.
¿Qué hacer en caso de mareo?
Cuando se sienta mareado debe mantener los ojos abiertos, parar, y mirar algún punto fijo situado en frente. Al hacer esto durante unos segundos, normalmente la sensación de mareo pasa de forma rápida. El vértigo es cuando la persona está parada pero siente que las cosas se mueven solas, y parece que el mundo está dando vueltas a su alrededor. Esta situación es muy común, y normalmente es benigna, y tiene cura, pudiendo ser solucionada con ejercicios oculares y una técnica específica que mejora las crisis de vértigo en pocas sesiones.