Por: Mariel Espindola – 20 de julio, 2021 400
Si creías que tener un parto en agua se trata de solamente una moda, no podrías estar más equivocada… Este método tiene muchos beneficios tanto para la madre como para el bebé.
Este artículo fue originalmente publicado por Mariel Espindola el 27 de marzo del 2019.
Existen diferentes tipos de parto en la actualidad y cada uno tiene sus ventajas y áreas de oportunidad, pero sin duda uno que ha tenido más auge en los últimos años por tener más beneficios que complicaciones, es el parto en agua.
Yuya, la famosa YouTuber nos sorprendió a todos hace unos meses con la noticia de su embarazo y a partir de ahí ha compartido todo su proceso de cambios como qué ropa utilizar para no gastar en piezas de maternidad y hasta cómo quiere que sea su parto. Yuya ha mencionado que está preparándose para tener a su bebé en agua.
¿Cómo funciona?
La mujer es sumergida en una bañera o tina con el agua a 37 ºC, aproximadamente, permitiéndole adoptar las posiciones que le resulten más cómodas ya sea sentada, acostada, de lado o a gatas.
La labor de parto es más fácil en el agua porque al no tener bloqueo o epidural, la madre va a tener una mayor urgencia de pujar para que el bebé nazca, lo que provoca que la expulsión sea mas sencilla y derive en la buena salud del recién nacido.
Beneficios para la madre
1. El agua caliente por naturaleza es calmante, reconfortante y relajante, lo que ayuda a que el proceso de labor de parto sea menos doloroso y estresante.
2. El efecto de la flotabilidad disminuye el peso corporal de la madre, lo que permite el movimiento libre para encontrar la posición más óptima y cómoda para el parto.
3. Promueve las contracciones uterinas más eficientes y una mejor circulación de la sangre que resulta en una mejor oxigenación de los músculos uterinos, menos dolor para la madre, y más oxígeno para el bebé.
5. El agua reduce las hormonas relacionadas con el estrés, permitiendo que el cuerpo de la madre para producir endorfinas que actúan como inhibidores del dolor.
6. El agua caliente promueve que el periné –el conjunto de músculos que sostiene los genitales– se relaje y sea más elástico, facilitando la distensión de la vagina al salir la cabeza del bebé, evitando así que las mujeres tengan desgarres o la necesidad de una episiotomía (incisión que se hace en el periné de la mujer, partiendo de la comisura posterior de la vulva hacia el ano para facilitar la expulsión).
7. La temperatura del agua hace que la mujer se relaje física y mentalmente con mayor capacidad de concentrarse en el proceso del parto.
8. Ya que el agua provee una mayor sensación de privacidad, puede reducir las inhibiciones, ansiedad y temores.
Beneficios para el bebé
9. El bebé no sufre de ningún modo, pues al salir se encuentra con un ambiente similar al saco amniótico, donde ha estado viviendo por 9 meses. Se toma su tiempo para irse adecuando al nuevo ambiente con más tranquilidad y en los brazos de su madre.
10. Elimina el estrés del nacimiento pues hasta que el bebé no salga del agua, le continúa llegando sangre oxigenada que proviene del cordón umbilical, favoreciendo la transición del líquido amniótico al mundo exterior.
Este método de parto tiene tantos beneficios que incluso muchas famosas como Hilary Duff se sumó a la tendencia del parto en agua. La cantante decidió tener un parto humanizado para fortalecer más el vínculo madre-hija con el temprano contacto piel con piel.
