Maribel Guardia se conmovió hasta las lágrimas luego de ver por primera vez una fotografía de su hijo, Julián Figueroa, en una ofrenda de Día de muertos, ya que la actriz tendrá que afrontar esta festividad recordando la inesperada muerte de su primogénito.

La cantante dio una entrevista en la cual estuvieron varios medios de comunicación presentes y ahí explicó que en la obra de teatro Lagunilla mi barrio realizaron una ofrenda y colocaron una imagen de Julián, lo que sin duda la conmovió.

Recordemos que han pasado siete meses de la repentina muerte del también hijo del cantante Joan Sebastian, fallecido en 2015. Maribel confesó que aunque está tranquila, aún no supera haber perdido a su hijo quien tenía apenas 27 años.

La actriz detalló que este 2023 ha sido un año muy complicado para ella: “Indiscutiblemente un año muy, muy, difícil. Yo le llamaría annus horribilis, un año muy fuerte. Tengo que continuar, con mi nieto, con mi esposo y mi familia”.

Maribel también mencionó que para Julián Figueroa, el Día de muertos era una fecha muy importante para él, pues sin falta colocaba la ofrenda en honor a su padre.

“Estas fechas eran muy importantes para Julián, él siempre hacía un altar de muertos precioso. Le escribía cartas a su papá y la vida continúa”, contó.

Debido a esta festividad, la actriz contó que en su casa también habrá una ofrenda en honor a su amado hijo y tendrá que enfrentar finalmente uno de sus grandes miedos. Este es entrar al cuarto donde Julián perdió la vida, víctima de un infarto fulminante.

Maribel mencionó que entrará a la recámara para elegir alguna ropa y sombrero para colocarlos en el altar de muertos que colocará en su casa.

“Va ser muy difícil para mí, porque ni siquiera he entrado al cuarto, ni he agarrado sus cosas, su ropa. Lo tengo que hacer. Es un paso que tengo que hacer porque esta noche voy a montarlo (la ofrenda). Tengo que elegir algunas cosas de su ropa, de sus sombreros”.

La famosa aseguró que a pesar de que le duele esta pérdida seguirá adelante: “Tengo que hacerlo muy lindo y con mucho amor para él. Lloro por egoísmo porque lo extraño y quisiera abrazarlo, pero sé que mi hijo está mejor que nadie”.