La manifestación de la desigualdad de género se evidencia porque ellas destinan un promedio de 25.7 horas a la semana a los trabajos domésticos, a diferencia de los hombres que solo invierten 11 horas.

Aunado a ello, el 66% del tiempo de las féminas lo ocupan en labores de trabajo no remunerado en el hogar y el 30% es para el mercado de trabajo; a contra parte, los hombres dedican el 67% a su oficio mientras el 30% para trabajos domésticos.

La encuesta reveló que el promedio de tiempo laboral de las mujeres por semana es de 59 horas, mientras que los hombres tienen un promedio de 53 horas trabajadas en el mismo período.

Los estados donde las mujeres tienen mayor desventaja laboral son Zacatecas, con 12 horas de diferencia; Guerrero con 9.6; Oaxaca con 9; Sinaloa con 8.7 y Veracruz con 8.7.

Mientras que los estados donde ambos géneros tienen menos contraste son Campeche con 0.4, Quintana Roo con 1, Yucatán con 2, Tabasco con 3.5 y Nuevo León con 3.7.

En un comparativo entre los años 2014 y 2019, aumentaron las horas de trabajo doméstico no remunerado para las mujeres, puesto que la cifra pasó de 29.8 a 30.8 horas; en tanto, para los hombres se elevó de 9.7 a 11.6 horas a la semana.

A pesar de que las mujeres destinan más tiempo para el cuidado del hogar, los hombres ocupan más horas para actividades de esparcimiento y recreación, como deportes o ejercicio físico; sin embargo ellas superan en tiempo destinado para la convivencia familiar y social.

Los hombres dedican 4.4 horas a la semana a rezar, meditar o descansar, mientras las mujeres registran 3.8 horas para esta actividad.

La población mayor de 12 años destinó promedio 9.3 horas a los cuidados directos, pero las mujeres reportaron 12.3 horas para este rubro.

Fuente forbes.com.mx